Sexo, flechazos y aplicaciones de móvil: la evolución del dating online

GoodRebels

3 abril 2014

– ¿Cómo os conocisteis?

– Por internet.

Probablemente, hace una década esta respuesta sólo la hubieses escuchado en El Diario de Patricia o en algún programa de radio de madrugada. Y es que, hasta hace poco, decir que ligabas por internet prácticamente te definía como una persona desesperada, un freak o incluso un psicokiller. Pero a día de hoy, la situación se ha normalizado y según el INE, ya son más de la mitad de los solteros españoles los que buscan pareja en Internet (3 de cada 4 en EEUU).

Al principio, para ligar online en España había que acudir a plataformas como el IRCHispano, una comunidad con cientos de salas de chat temáticas donde podías encontrar gente anónima con tus mismos gustos. Después, la cosa fue evolucionando y comenzaron a aparecer los primeros portales específicos para encontrar pareja. Éstos se dividieron en dos grandes grupos según los servicios que ofrecían. Por un lado, los que ofrecían Matchmaking (aquellos que asignan perfiles compatibles basándose en rasgos de personalidad, gustos y costumbres similares) y, por otro, los que ofrecían Online Dating (búsqueda de encuentros esporádicos más enfocados al flirteo).

Así surgieron cientos de webs para buscar pareja con dos principales empresas que actualmente dominan el panorama mundial de las relaciones online. Encontramos la estadounidense Match.com (que compró a la francesa Meetic en 2011) y al grupo germano-californiano eHarmony/eDarling.

Su modelo de negocio está basado en la suscripción mensual a sus servicios con una cuota mensual de 35 € (la mitad si contratas por 6 meses o más). Sólo entre eHarmony y Match ya suman 50 millones de abonados, de ahí que el negocio de las citas online moviese más de 2.000 millones de dólares en 2012 – convirtiéndose en el tercer servicio de internet por generación de ingresos, solo por detrás del musical y el de vídeos –.

Redes sociales y Apps Móviles: el último revolcón

Pero entonces llegaron las redes sociales y los smartphones para poner al sector a cuatro patas. En 2006 se lanzaba Badoo, una red social utilizada básicamente para ligar y que ya suma 150 millones de usuarios. Por entonces, los usuarios de redes sociales como Facebook o Twitter ya aprovechaban la gratuidad de las mismas para practicar un cortejo que en otros portales era de pago.

Poco después, en 2009, nace Grindr, una aplicación de móvil exclusiva para el público gay que introduce el geoposicionamiento para ligar con aquellos hombres que se encuentren más cerca en ese momento. Su éxito ha sido tal que ya hay versión para heterosexuales y para lesbianas.

Poco a poco se va poniendo de moda el RolloShopping, o lo que es lo mismo, comparar perfiles de candidatos «pinchables» y sus gustos para quedarte con el que más te guste, como cuando te vas de compras. Una especie de showrooming pero llevado al mundo de las relaciones.

Viendo esta evolución, las grandes compañías no tardan en ponerse las pilas para no quedarse atrás. Así, Match.com lanza Tinder, una original app para el púbico heterosexual en la que te registras vía Facebook y que al igual que Grindr, busca personas anónimas cerca de ti pero filtradas por tus gustos en Facebook.

Mientras, van surgiendo aplicaciones de dating cada vez más originales. Hace un año se lanzó en España Adopta un Tío, que viene avalada por más de 7 millones de usuarios en Francia. Se trata de una original aplicación donde las mujeres tienen el poder de tratar a los hombres como “mercancía” y meterlos en un carrito de la compra virtual para ligárselos. Otras más locas como Carrotdating, donde “sobornas” a una persona para que tenga sexo contigo (algunos consideran esta app un tipo de prostitución), o más polémicas como Ashley Madison, un site donde mantener relaciones extramatrimoniales e incluso aparece una aplicación para mantener relaciones ficticias con una novia de mentira.

Para otros a los que ligar solos les resulta aburrido existen platafomas donde flirtear a seis bandas. Convencen a dos amigas o amigos suyos y se adentran en una cita a tres, de este tipo de citas se encarga Groopify que, sabiendo tus gustos, te asesora y te ofrece una experiencia sin necesidad de pensar en el lugar idóneo para quedar. Ellos te lo facilitan todo, chicos, lugar y fecha…

Y es que parece que la tecnología cada vez le allana más el camino a Cupido. Y tú, ¿has ligado alguna vez por internet? ¿Te atreves a contarnos tu experiencia o te llevamos mejor a El Diario de Patricia?