Puesta al día del marketing clásico

GoodRebels

31 mayo 2010

Cuando uno se dedica a fabricar pintura, no resulta fácil crear una imagen que llegue a grandes sectores de la población. Es difícil meter jóvenes, chicas, música, fiesta, sexo o crear un ambiente épico en un spot dominado por un bote de pintura. Tales objetos ni siquiera son capaces de sonreír y crear un mínimo de buen rollo.

De modo que cuando Euro RSCG Londres recibió un encargo de la multinacional de la pintura Dulux, optó por el método más sencillo para promocionar un producto desde que existe el marketing: mostrar sus ventajas. Eso sí, pusieron el viejo clásico más que al día con una campaña altamente viral, con impacto social real sobre ciertas comunidades, presente en las redes sociales, solidaria y agradable visualmente. El resultado fue el Let’s Colour Project.

Durante varios meses, un equipo de blogueros, ejecutivos de la marca y publicistas recorrieron barrios deprimidos de varias ciudades del mundo proponiendo a los vecinos repintar los muros y fachadas del vecindario. La empresa puso 6.540 litros de pinturas de varios colores y el equipo reclutó a 650 vecinos de distritos deprimidos de Londres, París, Río de Janeiro y la ciudad india de Jodhpur. Entre todos se pusieron manos a la obra y, entre tanto, la agencia grabó el spot que traemos hoy.

Lo interesante de la campaña no es sólo la creatividad exhibida, sino cómo los valores que han seleccionado (cooperación, solidaridad, belleza), sin dejar de ser recurrentes, son oportunos en el momento económico que vivimos. Algo que, por sencillo que parezca, no parece haber sido tenido en cuenta en la última campaña de Volkswagen para promocionar el último Polo. Las 25 cosas que hacer antes de los 25 podrían tener una recepción similar al infausto Esto sólo lo arreglamos entre todos, por mucho que el target elegido sea distinto.

Pero, volviendo a las pinturas de hoy, parece que estamos asistiendo a la instauración de la fórmula narrativa (director de cine, historia que contar siguiendo el modelo clásico, efectismo visual cinematográfico) en campañas dotadas de grandes recursos. Como se plantean en el blog Quiet Glover, la duda está en ver si esto también es posible con pocos recursos. Como firme creyente en la creatividad y en el poder de la inteligencia, respondo que sí.

Vía | Quiet Glover