
Open Government: cómo se hizo la selección de los “Men in Black” del gobierno colombiano
4 diciembre 2013
Muchos de vosotros conocéis o tenéis en vuestras empresas perfiles profesionales que se definen como Controller Financiero, algo así como el responsable que desarrolla una conexión entre control de gestión y contabilidad, concibiendo esta última como una herramienta de supervisión de la actividad y no como un simple instrumento legal. En lenguaje más coloquial, los Men in Black deben cuidar que los recursos financieros no se pierdan por el camino (un asunto muy terrenal, que no sabemos si se produce también en el ecosistema alienígena).
En el sector privado, el proceso de selección de estos profesionales podría ser equiparable al de otros cargos dentro del departamento financiero. Pero, ¿cómo debería ser este proceso de selección si estamos hablando de un Ministerio, una Gobernación o cualquier entidad pública que maneja presupuestos multimillonarios y que tiene como lastre innumerables casos de corrupción a sus espaldas?
Un proceso abierto por medio de la creación de un nuevo ecosistema digital
El gobierno colombiano quiso responder a esta respuesta e integrarla en sus políticas de Open Government, recogidas en su afiliación al Open Government Partnership, que pretende promover los principios del buen gobierno, la efectividad, eficiencia y transparencia en la lucha contra la corrupción
Para ello, el gobierno liderado por el presidente Juan Manuel Santos y su Secretario Anticorrupción y de Transparencia, Carlos Fernando Galán, idearon un proceso, abierto a la ciudadanía, con el objetivo de seleccionar a los futuros Jefes de Control Interno y evitar contratar a dedo a estos profesionales encargados de salvaguardar las arcas públicas.
Lo original de este proceso fue que se desarrolló en su totalidad en el entorno online. Desde la promoción de esta convocatoria, hasta la Atención al Cliente/Usuario (ATC), se utilizaron los canales sociales de sus cuentas en Twitter y Facebook, creando un precedente en Colombia en el uso de estos medios sociales por medio del hashtag #controlinterno, que generó conversación con los usuarios durante todas las etapas del proceso.
Además, se desarrolló una plataforma tecnológica en la que los candidatos que cumplieran con los requisitos mínimos de formación y experiencia podrían participar en las sucesivas pruebas que estaban establecidas.
Más de 3.800 colombianos participaron en estas pruebas selectivas, en las que destacaron los comentarios positivos sobre la transparencia y la fiabilidad del proceso, algo que no ocurría en la mayoría de las búsquedas de candidatos en el sector público. El mismo Presidente Santos quiso estar presente en el nombramiento de los candidatos seleccionados, destacando este proceso como uno de los ejemplos de su gobierno en materia de Gobierno Abierto.
Hacia un gobierno más democrático y efectivo
Colombia sigue realizando esfuerzos para crear un gobierno más participativo por medio del Plan de Acción de Colombia ante la Alianza para el Gobierno Abierto. Una iniciativa que ha recibido más de 1.700 propuestas de ciudadanos y que ha superado las 6.500 impresiones en las redes sociales, y en pocos meses de trayectoria.
Algunas de las premisas más importantes de este Plan de Acción son las siguientes:
- Gobierno en línea: Permitirá las transacciones en línea de los servicios que prestan las entidades para prestar una atención oportuna al ciudadano.
- Datos abiertos: Permitirá encontrar de manera unificada, y en formato abierto, todos los datos publicados por las principales entidades del estado.
- Regulación en los servicios públicos: Colombia continuará con la promoción de la transparencia en la regulación de los servicios públicos, para que la información publicada este organizada y se divulgue en lenguaje fácil y claro al ciudadano.
- Mejor servicio al ciudadano: Colombia cuenta con una política pública de servicio al ciudadano que busca implementar mejores estándares de atención al ciudadano y el uso de mecanismos no presenciales con base en las nuevas tecnologías.
Un primer paso, al que le falta un largo recorrido, pero que demuestra que las estrategias de Open Government de los gobiernos democráticos, impulsadas desde los medios sociales y el entorno digital, son irremplazables en la nueva cultura ciudadana.

