
Internet de las Cosas: conectando el mundo real
9 mayo 2012
Fernando. Hombre blanco, 40 años, 1 metro 72 centímetros. Se levanta por la mañana. Es temprano, tiene sueño y está cansado, pero va a empezar el día cumpliendo una de las promesas de este año: perder unos kilos. Tras pesarse en su báscula descubre en su iPhone una verdad incómoda: pesa más de lo que debería, su materia grasa es excesiva y su masa muscular demasiado baja. No sólo eso, está un 10% por encima del peso de gente de su edad y estatura. Hay que hacer algo. Decide salir a correr. Al volver se lleva el segundo revés del día: corre más despacio que hace 1 año, su corazón late desbocado y comparándose con otros corredores queda entre los últimos puestos.
Desde hace tiempo esto no es ciencia ficción ni parte de un sueño cyberpunk: son cosas reales, cada vez más cotidianas. Casi todos los que estéis leyendo esto habréis sufrido las actualizaciones tipo «Pepito ha corrido 23 km. en 2 horas» que a veces nos martirizan por Facebook. Pueden parecer una anécdota, pero son una materialización clara del potencial de Internet de las Cosas.
¿Qué es Internet de las Cosas?
Empecemos por Wikipedia: «Internet de las cosas» se refiere a una red de objetos cotidianos interconectados.1 El concepto de Internet de las cosas se atribuye a Auto-ID Center, fundado en1999 y basado en el MIT.2
La idea es muy simple pero su aplicación no tanto. Si todas las latas, libros, zapatos o partes de un vehículo estuvieran equipados con dispositivos de identificación minúsculos, la vida cotidiana en nuestro planeta sufriría una transformación. Ya no existirían cosas fuera de stock o productos perdidos, porque nosotros sabríamos exactamente lo que se consume en el otro lado del planeta. El robo sería una cosa del pasado, sabríamos dónde esta el producto en todo momento.
Fundación Bankinter elaboró un estudio (totalmente recomendable) sobre este tema:
El Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en Inglés), consiste en que las cosas tengan conexión a Internet en cualquier momento y lugar. En un sentido más técnico, consiste en la integración de sensores y dispositivos en objetos cotidianos que quedan conectados a Internet a través de redes fijas e inalámbricas. De esta manera, cualquier objeto es susceptible de ser conectado y «manifestarse» en la Red. Además, el IoT implica que todo objeto puede ser una fuente de datos. Esto está empezando a transformar la forma de hacer negocios, la organización del sector público y el día a día de millones de personas.
El objetivo ideal sería lograr que cualquier objeto tenga «vida propia«, y con ello, una identidad. Si todos los objetos cotidianos estuvieran equipados con etiquetas de radio, podrían ser identificados y gestionados de forma automática de la misma manera que si lo hiciesen seres humanos. Para llegar a este nivel, todavía nos quedan algunos deberes por hacer; necesitamos evolucionar a la próxima generación de aplicaciones de Internet (protocolo IPv6), ya que únicamente así podríamos asignarle un único identificador a cada objeto.
Básicamente: si los objetos pasan a estar conectados, pueden interactuar en red, entre ellos o con personas, ya sea enviando y recibiendo información o realizando determinadas acciones en función de los datos disponibles. Algo que abre posibilidades ilimitadas, y no sólo en el Marketing. Tenemos ejemplos curiosos, con años de antigüedad que no llegaron a despegar del todo, y otros que hoy son ya casos de referencia.
Qué se puede hacer gracias a Internet de las Cosas
Arduino, el poder de lo abierto
Arduino es una plataforma electrónica abierta utilizada para la creación de prototipos. Está basada en software y hardware flexibles y que a la vez son fáciles de usar. Arduino es la plataforma que hace posible crear experiencias y conceptos de Internet de las Cosas porque tiene la capacidad de interactuar con el entorno a través de sensores, comunicaciones inalámbricas, motores y otros actuadores. En el vídeo se narra cómo fue el proceso de concepción y desarrollo de esta plataforma. Arduino es una plataforma de electrónica basada en el principio del hardware libre, no propietario, que permite su programación para el fin deseado.
Qué se puede hacer con Arduino
Básicamente, lo que se quiera. Desde manejar una canoa con el mando de la Wii o crear un «harpa láser«. Aquí os dejamos una lista con 40 brillantes ejemplos.
iPavement, baldosas inteligentes
El pavimento inteligente (desarrollado en España, lo tenemos en Puerta del Sol) lleva la tecnología a las baldosas de toda la vida. Otra forma de ofrecer datos geolocalizados y todo tipo de servicios, que nos acercarán más a las Smart Cities.
Qué se puede hacer con iPavement
Permite interactuar a través de Wifi y Blue-tooth, con distintas aplicaciones (desde cupones a mapas). También ofrece estadísticas del uso del suelo: cuánta gente pisa, por ejemplo.
Nike y Adidas: el deporte compartido
Adidas con miCoach y Nike con su (ya convertida en clásica) iniciativa con Apple son dos ejemplos de lo que Internet de las Cosas puede hacer en productos de consumo, añadiendo una capa social por encima y dotándola de ciertos componentes de Gamification.
Poder convertir en real lo virtual, obteniendo datos de nuestras carreras, es sólo un primer paso.
¿La nueva revolución industrial?
Se ha repetido tantas veces que quizá lo hemos devaluado, pero si algo tiene capacidad de impactar en cómo se organiza la producción es la aplicación de Internet de las cosas. Al menos eso opinaba Bill Ruh, director Global de Tecnología de General Electric, en Forbes, a finales de 2011:
is a movement that, like the Industrial Revolution, will have a profound effect on our social, economic and cultural circumstance
El impacto que pueda tener una industria más conectada, más inteligente y en tiempo real en toda la economía promete ser enorme. ¿Os imagináis que vuestro concesionario pudiera saber el estado del motor de vuestro coche? ¿Que se pudiera tener acceso a toda la información agregada? La información es poder, y la privacidad en estos aspectos algo que todavía puede quedar por definir. Pero esa es otra historia.
Recursos:
- Informe Fundación Bankinter.
- Internet de las Cosas (IBM).
- Internet de las Cosas en el sector automoción.
- Previsiones M2M en el sector de las utilities.

