Bebes en la basura

Aránzazu Mancisidor

18 abril 2006

Una marca de anticonceptivos desarrolló en Tailandia una campaña difícil, controvertida y muy llamativa. En este país se tiran nada menos que tres niños a la basura cada día, hijos fruto de embarazos no deseados.

Tailandia1 La farmacéutica Schering, de la mano de OgilvyOne, realizó una campaña de guerrilla con falsos contenedores de basura. En los contenedores se instalaron detectores de movimiento que se activaban al paso de cualquier persona y que accionaban un reproductor de sonidos, que emitía el llanto de un niño, haciendo ver que había sido abandonado dentro del cubo.

Cuando el transeúnte abría el contenedor no encontraba niñ@ ni basura, sino un cartel anunciando la píldora de la empresa farmacéutica. Tailandia2

Los contenedores se colocaron en los alrededores de las universidades, lo que muestra que la campaña se dirigió a personas de cierto nivel cultural y adquisitivo. Además, el mensaje en el cubo de basura sólo remitía a una página web, con lo que montones de personas humildes sin acceso a la red quedaban automáticamente fuera de la promoción. Sin embargo, se puede confiar en el poder del boca-oreja despertado por lo controvertido y llamativo de la campaña.