A Facebook no le gusta el botón «no me gusta»

GoodRebels

17 septiembre 2015

Ayer recibíamos la noticia y acto seguido, se desataba la euforia. Ciertamente, Mark Zuckerberg no confirmó en ningún momento que Facebook incluiría el botón «no me gusta» en su plataforma pero sí adelantaba que habrá alternativas al ya común, «me gusta». Pero, ¿a qué se refería exactamente el fundador de Facebook? ¿Qué supondrá esta incorporación para usuarios y marcas? ¿Tenemos que alegrarnos o enfadarnos?

Eran muchos los que lo habían pedido y Zuckerberg, ha escuchado y respondido: habrá una alternativa a «me gusta». Según explicó, habrá un botón que se puede utilizar para mostrar empatía ante situaciones negativas. En la época en la que compartimos todos nuestros sentimientos, acciones y eventos relevantes, probablemente os sintáis identificados con esta situación:

Algún contacto de Facebook comparte en la plataforma una fotografía informando a sus amigos de que se ha roto una pierna y una escayola le acompañará durante dos o tres meses. Acto seguido, su fotografía se llena de «me gusta»… y tú te preguntas, ¿por qué?: ¿a la gente le gusta que funalito se rompa la pierna? ¿lo que les gusta es que se vaya a quedar sin vacaciones? ¿en serio les gusta?

Lo que Mark Zuckerberg aspira a paliar con esta nueva alternativa es la «crueldad» que surge en ocasiones de este tipo en las que los usuarios no quieren comentar pero no tienen otra opción al botón «me gusta». Sin embargo, tampoco ha confirmado 100% que lo que la plataforma vaya a incorporar sea el botón contrario: un asertivo «no me gusta».

Inevitablemente, aunque ese sea el objetivo principal del botón para sus creadores, las marcas y artistas con presencia en forma de fanpage en la plataforma, mostraron su preocupación ante ese nuevo anuncio ante los posibles «no me gusta» que podrían recibir y cómo su imagen de marca y reputación se vería afectada. Pero, ¿qué pasaría si finalmente, Facebook incluyera un botón «no me gusta»?

  1. En primer lugar, la incorporación de este nuevo botón daría lugar a un incremento de la interacción. Es decir, es probable que el engagement fuera superior al haber también una nueva posibilidad de interacción frente a los «me gusta», «compartir», «comentar» o el acceso a los enlaces.
    Sin embargo, también sería mucho más importante ser cautelosos a la hora de interpretar los resultados. Esto es, Facebook no ha adelantado si estas interacciones ponderarían de forma negativa en sus KPI’s e insights. En cualquier caso, habremos de ser capaces de interpretar el engagement rate: puede que el porcentaje de usuarios que interactúan con nuestras publicaciones sea superior pero no por ello mejor: habrá que distinguir qué parte de esas interacciones son positivas.
  2. Siguiendo este tema de la subjetividad, tendríamos que interpretar la intención tras un «no me gusta» ya que no siempre tendría por qué ser negativo. Por ejemplo, en un post en el que publicáramos «se acaban las vacaciones»; un «no me gusta» no iría ni contra la marca ni contra el post, sino que se trataría de vinculación y empatía con el contenido.
  3. Por otro lado, creemos que este botón podría aportar un valor añadido. Es decir, nos permitiría saber si hasta ahora no teníamos más interacciones en los post por falta de interés de los usuarios… o más bien por rechazo. En caso de que el botón «no me gusta» se implemente, podríamos comprender el comportamiento de los usuarios y tomar nota para mejorar nuestra estrategia, empezando por los contenidos.
  4. También pensamos que en caso de haber «no me gusta», los «me gusta» tendrían más valor. ¿Por qué? En un contexto en el que únicamente se puede manifestar una valoración positiva sobre un contenido, es más fácil hacerlo por compromiso, simpatía… Sin embargo, en caso de tener ambas posibilidades, ese «compromiso» quedaría a un lado y se pasaría a «ignorar». Es decir, usuario que de verdad le gustara una publicación, daría «me gusta» y al que no, daría a «no me gusta». ¿Al que le diera igual? Haría scroll en busca de una publicación mejor.
  5. En caso de que finalmente este botón viera la luz, podría ofrecer nuevas y grandes posibilidades creativas a los planes de contenido, «me gusta si eres de x o no me gusta si eres de y…» entre otras muchas.

Esto es lo que pasaría en caso de que el botón «no me gusta» saliera adelante. En cualquier caso, no pongamos la mano en el fuego por ello. Por un lado, si los usuarios ven que sus publicaciones comienzan a llenarse de «no me gusta», es probable que reduzcan su número de publicaciones… y eso, a Facebook, no le interesa. Al contrario, lo que Zuckerberg y cía buscan es un aumento de interacciones y actividad por lo que no tirarán piedras sobre su propio tejado. Eso si hablamos de usuarios. Si nos ponemos en la piel del responsable de una marca, la posibilidad de que las publicaciones se llenen de «no me gusta» despertaría al mismísimo Miedo de «Del revés». Y por supuesto, de invertir en campañas de Paid Media ni hablamos…Con todas estas premisas en mano, nuestra apuesta es que Facebook no implementará el botón «no me gusta» en la plataforma pero sí que apostará por otro tipo de botones que incrementen la interacción y que muestren empatía. Tal vez un botón «abrazo», botón «te acompaño en el sentimiento», botón «ánimo», botón «esto no me gusta ni lo más mínimo pero me solidarizo contigo y te envío toda la fuerza del mundo»….

Y tú, ¿qué opinas? ¿con qué nos sorprenderá el bueno de Mark?